Es el título del cuadro con misterio. Su nombre era, Madame Gautreau, esposa de un adinerado banquero del lujoso Paris de 1888. El retrato pintado por John Singer Sargent, fue expuesto en El Salón de Paris; provocando un enorme escándalo; la causa, un tirante fuera de lugar, el artista tuvo que rectificar su obra; vetado por la sociedad parisina, se traslado a Londres donde vivió hasta su muerte. Este polémico cuadro, el mejor de toda su obra, según el propio Sargent; marco en el vestuario femenino, un antes y un después, en el uso del color negro, mas allá del luto, o manifestaciones religiosas. Por primera vez, vestir de negro, no implicaba rigor o austeridad, sino sensualidad.
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