Su verdadero nombre era Antonia Bronchalo Lopesino (su segundo apellido le sirvió para crear su nombre artístico: Lupe Sino). Y no nació en México, si no en España. En realidad este continuado error sobre su nacionalidad es producto del maltrato que esta mujer sufrió en su época, reflejado en la memoria histórica de los españoles, para los que nunca dejó de ser la mujer caprichosa, que "Manolete" el gran torero, conoció una noche en "Chicote". Desde la muerte del diestro, cayó sobre ella una maldición de habladurías y maledicencias que la borraron del mapa, sería conveniente hacer unas aclaraciones sobre esta historia que tanto se ha falseado. Al morir Manolete, Lupe Sino podría haber sido la viuda de España, dueña de todo el morbo del mundo, pero en aquella época no valía de nada ser pareja de hecho. Vivir como ellos vivieron era estar en pecado y chocaba con la moral impuesta por la iglesia tras la contienda civil. Lupe vivió unos meses muy duros tras la muerte del torero. La situación era muy dolorosa y tras participar en su última película, se marchó a México y allí se casó años más tarde, ironías del destino, con un abogado mexicano llamado Manuel Rodríguez, hombre bien situado y de gran fortuna del que se divorció al poco para volver a España. Lupe murió sola en su casa de Madrid, en el año 1959, de muerte repentina. Si media España lloró cuando murió el hombre de su vida, su muerte, pasó desapercibida.
Fuentes: Rafael G. Zubieta “Diario de Córdoba”